Dedicación y compromiso.

Nuestro recorrido comenzó con una simple admiración por la elegancia y el carácter distintivo del schnauzer miniatura. Con el tiempo, lo que en un inicio fue una fascinación por su estética se transformó en una verdadera devoción y compromiso total con la raza, impulsado por años de experiencia y dedicación. A través de actividades como el Agility, Obediencia (OCI), Trabajo (IGP), exposiciones de morfología y convivencias diarias, hemos aprendido a apreciar el verdadero carácter del schnauzer: equilibrados, enérgicos, guardianes naturales y, ante todo, compañeros inigualables. Este pequeño gran perro nos ha arrebatado el corazón.

Nuestra dedicación va más allá del amor por la raza. Nos enorgullecemos de implementar un enfoque profesional en cada etapa de la cría, respaldado por una formación constante en genética, reproducción, neonatología, nutrición BARF, adiestramiento en positivo, peluquería y aseo canino. Nos mantenemos al día asistiendo a seminarios y trabajando con expertos y referentes de la raza para garantizar que nuestros ejemplares reflejen lo mejor del schnauzer miniatura. Nuestro objetivo no es solo criar—somos criadores, no un criadero—, sino contribuir positivamente a la evolución de la raza. Cada cruce se selecciona de manera rigurosa, buscando no solo adherirnos fielmente al estándar oficial de la raza, sino también aportar características únicas que diferencien a nuestros ejemplares. Nos esforzamos por criar schnauzers de carácter equilibrado, salud óptima y estética refinada, que representen lo mejor de la raza y aporten valor a su desarrollo.

Además de nuestro compromiso con el schnauzer miniatura, disfrutamos de la compañía de otras razas que también forman parte de nuestra familia. Caniches Toy, Terrier Brasileño, Yorkshire, entre otros, han encontrado un hogar con nosotros, incluyendo algunos adoptados. Aunque practicamos la cría selectiva y ética de perros de pura raza , creemos que todos los perros merecen amor, cuidado y respeto, sin importar su linaje.